Vivicidio
No he sido capaz de matarme
Pero he sido capaz de no matarme
¡algo es algo!
bueno, eso es lo que pongo para hoy, un dìa bastante ajetreado y que no se bien en que terminara...
gracias por los comentarios, aunque mas de la mitad valen hongo... solo dire que se hace lo que se puede... nada mas...
lo anterior es un pequeño poema de Claudio Bertoni, que fue un libro que encontre por ahí y que me encantó. En los próximos días iré agregando más cosas, ya que este blog lo hice en su honor.
un beso a todos!!!
miércoles, agosto 31, 2005
domingo, agosto 28, 2005
¡ y yo que quería poner algo lindo !
el día esta lluvioso, quizàs por eso mi estado de ànimo... no piensen que es malo, me gusta la lluvia... escribì algo, querìa ponerlo aqui, pero el disquet culi... bueno, na que hacer, la vida...
algo asi como esta foto me siento...
con cara de nada...
na que hacer...
la vida...
yoyo te quiero mucho...
no lo olvides...
un beso para ti...
ahora nos comunicaremos por aca
sábado, agosto 27, 2005
hoy es un dia lindo!!!!
toy con mi mejor amigo yoyo!!!!!
lo echaba mucho de menos... por eso, este coso va pa el... para que no colapse y le vaya la raja!!!!
aunque no lo dudo, ya que soy yo la oveja negra...
esta es una foto de él... un poco fantasiosa, pero él al fin y al cabo...
estoy aca en su casa... como muchas veces... eee... bueno... cosas de la vida... ojala postee algo el gil... aunque bonito el mail... ojala lo hubiera leido antes no mas... un besito pa ti!!!!
jojojojo
hoy es un dia mejor que ayer... alguein me protege... y a parte me desahogue demasiado...
saludos!!!
viernes, agosto 19, 2005
Confesiones de una dama en aprietos
Y así, sin más, comencé esa aventura, sin pies ni cabeza, dejando atrás una relación estable, que me daba todo lo que necesitaba, que valía tanto y yo no me había percatado, por cegarme a esto, que era nuevo, que sin pensarlo tomé, sin estar completamente segura, aun así, corrí el riesgo, sin imaginarme nunca que podría arrepentirme por el resto de mi vida. Si hubiera sabido lo que me iba a traer, si hubiera sospechado aunque fuera un poco a lo que me iba a llevar, quizás hubiera dado pie atrás, cuando aún era posible... pero quizás no, lo hubiera hecho igual, y es esa duda, esa maldita duda la que ahora no me deja tranquila, no me deja respirar, ni vivir, ni ser libre, andar por la vida como tanto me gusta... si supiera alguien cuento lo deseo, cuanto anhelo deshacerme de estas ataduras, que yo sola me he impuesto, pero que no puedo ignorar... ¿Es acaso este el precio de amar? Amar incondicionalmente, entregarlo todo, a veces parar... darte cuenta que no es retribuido... pero aún así seguir amando... No comprendo... todo estaba bien, bien me refiero a que los problemas eran solucionables, pero ella siempre pensaba que nunca llegaríamos a nada... ¿Ese fue el error? No lo sé y creo que jamás lo sabré, y eso me atormenta, me atormenta ahora que escribo, en las noches junto a mí almohada, no puedo dormir pensando en eso... Era tan bello... vivimos momentos tan felices, era tan hermoso, tan intenso... Nos gustaba torcerle la mano al destino, todo estaba en contra para vernos, pero ahí, cuando la esperanza estaba por perderse, el universo entero se ponía en movimiento, las fuerzas de la naturaleza se encomendaban por nuestro amor, y nuestras almas una vez más se juntaban, y eso, tan sólo eso, nos hacía eternamente felices... Si ustedes supieran, si ustedes hubieran estado tan sólo un momento en mis zapatos, me comprenderían y hubieran hecho lo mismo que yo, e incluso más... Hay veces que me pregunto si es que me amo alguna vez, si es que sintió un poco de lo que yo sentía, porque no cabe en mi cabeza como es que pudo o tuvo la fuerza para dejarme... Y ahora estoy sola... después de casi 3 años, estoy sola... y aunque muchos pensaran que no es terrible, que puedo hacer muchas cosas, no es el hecho, sino el cómo, las circunstancias, la forma, él porque... Él porque... ni yo misma sé bien él porque. Aveces una cosa, luego otra. -“es que no sé” -“pero tiene que inclinarse para un lado, sí o no” -“no sé, pero eso no importa, olvídate ¿ya?, no hablemos más de esto”. Me pregunto a veces ¿Cómo pude ser tan tonta?. Es que estaba enamorada, pero aún así, ¿ponerla antes de mí? Quizás ese fue realmente el error, pero a lo mejor hubo otra cosa. Se supone que debe ser así, que uno debe darse por completo, luchar por ese amor que uno cree el verdadero, el de toda la vida... Pero ahora terminó, y no puedo, no quiero pensar que fue en vano, que es realmente para siempre esto, que ya no hay vuelta atrás, que olvido todo, que ya no me ama, que no valora nada de lo que le entregue, y por eso ahora me ignora, como si yo fuera nadie, como si no hubiéramos vivido todo este tiempo hermoso, como si sólo hubiera sido un paréntesis en su vida... y para mi, que lo fue todo... Me da tanta rabia haber tomado la decisión que tomé, porque no lo hice con plena conciencia, siento que de una u otra forma, todo fue encasillado y no me quedó otra alternativa. Tengo miedo, tanto miedo... no sé bien porque, supongo que porque ahora debo enfrentarme sola al mundo, tratar de volver a ser yo, la que fui algún día. Lo único que agradezco, es que mis ganas de amar, mi capacidad de amar, aún está viva, por lo menos, eso no pudo quitarme. Pensé que moriría, pero no, yo puedo seguir amando, incluso más de lo que la amé a ella, y de eso me puedo sentir orgullosa, sólo de eso... Miles de horas junto a ella, noche y día pensando en nosotras, que daría yo en este momento por abrasarla, besarla una vez más, decirle que la amo, que todo fue un mal sueño, que tenemos una vida por delante, un futuro que seguir construyendo, una vida que vivir... La amo, la amo tanto, que dudo que algún día pueda olvidarla, marcó mi vida, nunca volveré a ser como antes, la vida sigue, y yo tendré que saber vivirla, de alguna manera tendré que echarme esta historia en mis hombros y seguir, queda mucho por delante, nunca seré yo misma otra vez, y eso me da miedo, mucho miedo... Nos cerraron las puertas en todas partes, en estas cosas, lamentablemente la familia, quien se supone es quien debe apoyarte, es quien más te juzga. ¿Cómo no comprenden que así soy feliz, que la amo, que todo es maravilloso?. “Queremos lo mejor para ti” ¿y qué saben ellos que es lo mejor para mí?. Fui cobarde. Mientras más lo pienso, más me queda claro... fui una maldita cobarde. Si la amaba tanto, ¿por qué no gritarlo al mundo? ¿Para qué negarla? Todo por la maldita sociedad, ese miedo atroz de que te vean como un bicho raro... me da vergüenza... Pasa y pasa el tiempo y no puedo sacarme el asunto de la cabeza, esto de no hablar, últimamente me está afectando demasiado, pensé, por un momento, que todo había pasado, pero un encuentro cercano con ella me devolvió a la realidad, me sacó la careta que tanto tiempo me había salvado, me había ayudado a enfrentar la vida de nuevo, a salir al mundo sola, pero de nada sirve engañarse dicen. Como toda careta, no duró mucho. Y ahora, estoy peor, me carcome por dentro que las cosas sean así, me siento podrida, como muerta, siento que mi alma va de un lado a otro sin un sentido claro, no hay razones para seguir, ni siquiera sé si quiero seguir con esto... El mundo se hace tan pequeño para nosotras dos. Es cada vez peor la situación, esa maldita indiferencia me debilita, me quita las fuerzas que van quedando. Si me odiara, me importaría menos, pero simplemente me ignora... y eso es... terrible... |
jueves, agosto 18, 2005
El típico del olvido
Del daño que me has hecho
Me vengaré algún día
Mas, espero que mueras
Para hacerlo mejor
No he de vengarme en tu alma
Ya que no tienes alma,
Me vengaré en tu cuerpo
Me vengaré en tu carne
En esa carne innoble
Que no sintió el amor
Y cuando hayas muerto
Y reclames descanso
Serás mío y de Dios.
Te arrojaré a las faldas
De las sombrías montañas
Y el buitre de las sierras
Será mi vengador.
Con sus garras enormes
Te abrirá las entrañas
Y se pudrirá tu carne
A los besos del sol.
¿me envenenasteis
acaso mi vida con tus besos?
¿no estrujasteis con tus manos
todo mi corazón?
Y cuando me arrancasteis
El último pétalo
Me arrojasteis a la vida
Como una maldición
Por eso te odio tanto
Por eso te maldigo
Por eso he de vengarme
De tu infame traición.
Sí después de esta vida,
Hay premios, castigos
Úndele en el abismo
Del infierno, Señor.
¡tuviste sed de besos
y te entregué mis labios!
¿tuviste hambre de amores
y de amores te sacié!
Tranfría el alma,
Te acurruque en mis brazos,
Venías extraviado,
Y la luz te mostré.
He imprimiste mis labios
Y de mi fuente pura,
Secasteis el manantial,
Dejaste mi regazo
Que por ti se habría hecho,
Más blando y más amante
Que el sueño maternal.
¿Por qué, por qué lo hiciste?
¿acaso no sabías que tú eras
la razón de este vivir inquieto?
Ilusiones, sueños, amor,
Todo es mentira
¿qué puede haber ya cierto
sí tus labios mintieron?
Yo que te di mi vida
Yo que de rosas te sembré el camino
Hoy maldigo mi suerte.
Maldigo mi destino
Porque todo es mentira,
Mentira que yo vivo.
Mentira los amores,
Mentira los placeres,
Mentira la alegría
Y mentira el dolor.
Es mentira la muerte
Porque estoy viviendo
Es mentira la vida
Porque ya muerta estoy.
Quizás no fue culpable
Su corazón inmenso
No podía saciar de mí
Su sed de amor.
Yo le daba mi vida,
Mis besos, mis ternuras,
Era poco, Señor.
Comprende Señor
Toda la angustia
De un amor impotente
Que no sabe saciar.
Ya que como la vida
Que habla el evangelio
Le di lo que tenía
Y que quería que hiciera
Si no tenía más.
Y rechazó mi ofrenda,
Y tomó otro sendero,
Con él va mi vida
Tú lo sabes, Señor.
Déjame que le siga,
Aunque sea de lejos
Quiero escuchar su voz,
Déjame que le siga
Déjame que le siga.
Quizás por extrañas sendas
Sus pasos llevarán.
Déjame ir recogiendo
Las piedras en el camino
No vaya a tropezar.
Quizás si está cansado
Quizás sí esta dormido
Quiero ser su sombra
Que como un manto tranquilo
Lo envuelva al despertar.
Déjame ser su césped
Que haya blando su nido
Déjame ser su vino
Déjame ser su pan
Déjame ir a su lado
Sin que él nunca lo sepa.
Y febrilmente él ame a otra mujer,
Déjame entregarle
A esa mujer extraña
Todo el amor inmenso
Que yo tuve con él.
Me vengaré algún día
Mas, espero que mueras
Para hacerlo mejor
No he de vengarme en tu alma
Ya que no tienes alma,
Me vengaré en tu cuerpo
Me vengaré en tu carne
En esa carne innoble
Que no sintió el amor
Y cuando hayas muerto
Y reclames descanso
Serás mío y de Dios.
Te arrojaré a las faldas
De las sombrías montañas
Y el buitre de las sierras
Será mi vengador.
Con sus garras enormes
Te abrirá las entrañas
Y se pudrirá tu carne
A los besos del sol.
¿me envenenasteis
acaso mi vida con tus besos?
¿no estrujasteis con tus manos
todo mi corazón?
Y cuando me arrancasteis
El último pétalo
Me arrojasteis a la vida
Como una maldición
Por eso te odio tanto
Por eso te maldigo
Por eso he de vengarme
De tu infame traición.
Sí después de esta vida,
Hay premios, castigos
Úndele en el abismo
Del infierno, Señor.
¡tuviste sed de besos
y te entregué mis labios!
¿tuviste hambre de amores
y de amores te sacié!
Tranfría el alma,
Te acurruque en mis brazos,
Venías extraviado,
Y la luz te mostré.
He imprimiste mis labios
Y de mi fuente pura,
Secasteis el manantial,
Dejaste mi regazo
Que por ti se habría hecho,
Más blando y más amante
Que el sueño maternal.
¿Por qué, por qué lo hiciste?
¿acaso no sabías que tú eras
la razón de este vivir inquieto?
Ilusiones, sueños, amor,
Todo es mentira
¿qué puede haber ya cierto
sí tus labios mintieron?
Yo que te di mi vida
Yo que de rosas te sembré el camino
Hoy maldigo mi suerte.
Maldigo mi destino
Porque todo es mentira,
Mentira que yo vivo.
Mentira los amores,
Mentira los placeres,
Mentira la alegría
Y mentira el dolor.
Es mentira la muerte
Porque estoy viviendo
Es mentira la vida
Porque ya muerta estoy.
Quizás no fue culpable
Su corazón inmenso
No podía saciar de mí
Su sed de amor.
Yo le daba mi vida,
Mis besos, mis ternuras,
Era poco, Señor.
Comprende Señor
Toda la angustia
De un amor impotente
Que no sabe saciar.
Ya que como la vida
Que habla el evangelio
Le di lo que tenía
Y que quería que hiciera
Si no tenía más.
Y rechazó mi ofrenda,
Y tomó otro sendero,
Con él va mi vida
Tú lo sabes, Señor.
Déjame que le siga,
Aunque sea de lejos
Quiero escuchar su voz,
Déjame que le siga
Déjame que le siga.
Quizás por extrañas sendas
Sus pasos llevarán.
Déjame ir recogiendo
Las piedras en el camino
No vaya a tropezar.
Quizás si está cansado
Quizás sí esta dormido
Quiero ser su sombra
Que como un manto tranquilo
Lo envuelva al despertar.
Déjame ser su césped
Que haya blando su nido
Déjame ser su vino
Déjame ser su pan
Déjame ir a su lado
Sin que él nunca lo sepa.
Y febrilmente él ame a otra mujer,
Déjame entregarle
A esa mujer extraña
Todo el amor inmenso
Que yo tuve con él.
mi sobrino hermoso
Suscribirse a:
Entradas (Atom)