viernes, mayo 16, 2008

La entrada Nº 90

No sé si no entiendo porque no quiero, o porque realmente no quieren que entienda...
Estoy en ese estado confuso en que aún no sé bien en que pensar, que es lo correcto, que es lo que tengo que hacer o dejar de hacer, o si bien, todo lo que creía y tenía por seguro hasta el momento, es aún seguro, es aún cierto, o sólo es una falsedad absoluta que dejé que me embriagara con su líquido infame y mentiroso, y que ahora no me deja más que dudas, inseguridades y miedos que no existían, que no tengo porque tener, porque no son míos.

Me sentí destruida, sentí mi corazón estallar de tristeza por algo que nunca pensé que pasaría. Me desilucioné? si, y mucho, mucho más de lo que pensé algún día. Estoy decepcionada, estoy cansada, agotada, impotente por no saber que hacer, por sentir que mis palabras se las lleva el viento y que de repente es mejor dejar que se queden adentro, arraigadas dentro del corazón, para que no duela, para que no me hiera por dentro y comience a carcomerme la duda de los sentimientos.

Ahora soy yo la que tiene miedo...

Parece que es mejor no enterarse se ciertas cosas...