Me he visto envuelta en una serie de cambios. La mayoría tristes, terribles, forzados, que salieron de mi jurisdicción... Me siento obligada a hacer lo que otros imponen de manera voluntaria e involuntaria.
Me he visto recordando demasiado. No es que sea malo recordar, pero no podemos vivir de recuerdos. Leyendo un cuento de Ray Bradbury de mi libro favorito de él, "El Hombre Ilustrado", un hombre del espacio piensa, o cree que lo que no ve no existe, es decir, sólo existe lo que esta frente a sus ojos en ese momento, así, se ahorra el tema de los recuerdos, y no sufre si es que alguien ya no está, y cuando se encuentra a esa persona, es como si hubiera resucitado y se siente feliz, si no, es que está muerto.
No puedo hacer eso, no puedo dejar de recordar y añorar tantas cosas pasadas. No es que tiempo pasado fue mejor, pero hay cosas que me gustaría revivir en estos momentos.
Líneas, cartas, conversaciones eternas, complicidad, juego, besos, caricias, ganas de verte, de buscarte, de reir, de imaginar, de soñar...
Pero no estas, así que me trago todo esto mejor cierto?
No estas porque no quiero, no estas porque no quieres, no estas...
Como decía mi buen Hipólito, "La vida no es más que el ensayo general de una obra que no se representará jamás". Y como buena obra, unos entran, otros salen, hay buenos y malos momentos, pero el final debe ser bueno, por lo menos con un poco de esperanza.
Me di cuenta de que ya no preocupo por estupideces. Es decir, disminuí el espectro de posibles problemas típicos. Lo que antes era un problema, ahora no es más que cosas que pasan, entonces en ese sentido, no tengo problemas. Me siento con algo más de esperanza, un poco más optimista, será bueno eso cierto?
Al final todo pasa por algo. Mejor antes que después, así no me ilusiono. Eso si es un problema, aunque evito pensar en aquello, el tema de la ilusión. Odio las ilusiones, odio los podrían ser, si es que no lo son nunca. Tengo que leer el libro de las ilusiones.
A veces me canso de la gente. De nadie en particular, de la gente no más, de que existan, que vivan de esa forma tan vulgar, que no entiendan nada, que ocupen un espacio y ocupen aire, que ahora está tan malo.
A veces quiero dormir y no despertar jamás, para no ser testigo de las atrocidades que se ven a diario en este pais. Pero bueno, no va a pasar, así que mejor disfruto lo que pasa ahora.
Te escribo, te pienso, te busco... y nunca estás... no estas porque no quiero, no estas porque no quieres, no estas...
Pero no estas, así que me trago todo esto mejor cierto?
No estas porque no quiero, no estas porque no quieres, no estas...
Como decía mi buen Hipólito, "La vida no es más que el ensayo general de una obra que no se representará jamás". Y como buena obra, unos entran, otros salen, hay buenos y malos momentos, pero el final debe ser bueno, por lo menos con un poco de esperanza.
Me di cuenta de que ya no preocupo por estupideces. Es decir, disminuí el espectro de posibles problemas típicos. Lo que antes era un problema, ahora no es más que cosas que pasan, entonces en ese sentido, no tengo problemas. Me siento con algo más de esperanza, un poco más optimista, será bueno eso cierto?
Al final todo pasa por algo. Mejor antes que después, así no me ilusiono. Eso si es un problema, aunque evito pensar en aquello, el tema de la ilusión. Odio las ilusiones, odio los podrían ser, si es que no lo son nunca. Tengo que leer el libro de las ilusiones.
A veces me canso de la gente. De nadie en particular, de la gente no más, de que existan, que vivan de esa forma tan vulgar, que no entiendan nada, que ocupen un espacio y ocupen aire, que ahora está tan malo.
A veces quiero dormir y no despertar jamás, para no ser testigo de las atrocidades que se ven a diario en este pais. Pero bueno, no va a pasar, así que mejor disfruto lo que pasa ahora.
Te escribo, te pienso, te busco... y nunca estás... no estas porque no quiero, no estas porque no quieres, no estas...
